El primer lunes de Cuaresma, el Consejo de Hermandes y Cofradías de Sevilla organiza un viacrucis a la Santa Iglesia Catedral de Sevilla, donde una de las imágenes que procesionan en Semana Santa en la ciudad de Sevilla se convierte en la protagonista de este piadoso acto.

El viacrucis origen de la Semana Santa sevillana

La Cruz del Campo, el lugar que simbolizaba el Calvario en Sevilla y germen de la Semana Santa actual

En realidad, el viacrucis fue el germen de nuestra Semana Santa, en un principio su destino era la ermita de San Lázaro, pero desde comienzos del siglo XVI se comenzó a realizar al templete de la Cruz del Campo. Ese cambio fue debido al viaje que realiza Don Fadrique Enríquez de Ribera a Tierra Santa, donde realiza una medición de la distancia existente entre el pretorio de Pilatos y el calvario.

Recordando aquello, cada primer viernes de marzo, se realiza en el interior de la Casa de Pilatos, origen de ese viacrucis. El viacrucis de la Pía Unión poderlo contemplar es una experiencia mágica que nadie debería perderse, en ese marco único que es el Palacio de los Medinaceli.

Viacrucis de la Pía Unión en la Casa de Pilatos

Es uno de los primeros actos de la Cuaresma, que además coincide con otra importante devoción que se encuentra muy cercana, la del Cristo de Medinaceli, que se encuentra en la cercana iglesia de San Ildefonso. El poder visitar cada viernes el templo y ver ese mar de velas delante del Señor es algo impresionante y que nos retrotrae a otros tiempos, y además nos sobrecoge.

Fieles ante el Cristo de Medinaceli de Sevilla

Curiosamente, aunque la tradición del viacrucis, tal como vemos deriva del medievo, con esos primeros realizados por la hermandad del Silencio desde el templo de Omnium Sanctorum. En siglo XX la primera hermandad que posee un viacrucis regular por su feligresia de su titular es la hermandad de la Hiniesta. Esta importante y antigua cofradía de Sevilla, desde los años 60 realiza un viacrucis por su feligresía, que es una de las zonas más monumentales de la ciudad, realizando estación en los conventos de Santa Paula y Santa Isabel, la iglesia de San Marcos y la Capilla de los 7 dolores de nuestra señora que alberga la Cofradía Servita.

El primer viacrucis del Consejo de Cofradías de Sevilla

Cristo de Santa Cruz, primera imagen que salió en el Viacrucis del Consejo

En los años 70 del siglo XX se creó el viacrucis del Consejo de Hermandades y cofradías de Sevilla, la primera hermandad que se eligió fue Santa Cruz, la soberbia talla atribuida a Roldán hizo estación a la Catedral de Sevilla. A día de hoy, sigue realizando un solemne viacrucis por las calles de su barrio, que sin lugar a dudas es uno de los más bellos recorridos que se hacen en la ciudad durante la Cuaresma.

Desde ese momento han sido numerosas las imágenes que han ido realizando este piadoso acto, que, desde hace años, sólo realiza las estaciones del viacrucis en el interior del templo catedralicio.

Singularidades del viacrucis del Consejo de Cofradías de Sevilla

El Gran Poder, ha sido la única imagen que sin contar el viacrucis extraordinario por el año de la fe que no salió por causa de la lluvia ha salido en dos ocasiones, volcándose como siempre la ciudad de Sevilla con su Señor.

Las otras tallas en el viacrucis

Viacrucis de la Piedad del Baratillo 1985

Lo habitual cuando se realizan viacrucis es realizarlo con crucificados o nazarenos, pero debido a que en la Semana Santa de Sevilla se representan muchísimos pasajes de la Pasión se ha realizado con diferentes iconografías de imágenes e incluso también con imágenes marianas, algo que no es nada habitual.

De ellas destacamos por su originalidad, en este tipo de actos, el fabuloso conjunto de la Piedad de la hermandad del Baratillo, o la Soledad de San Lorenzo, una de las más importantes y antiguas devociones de la ciudad de Sevilla.

Crucificados erguidos

Viacrucis del Cristo de Montserrat. Primer crucificado en posición vertical en un viacrucis del Consejo de Cofradías

Habitualmente los crucificados han realizado estos piadosos actos tumbados o como mucho con una leve inclinación. En el viacrucis realizado por el Cristo de la Conversión de la Hermandad de Montserrat esto fue modificado, realizando el acto al igual que procesiona en Semana Santa, con unas andas donde permitía que el Señor se encontrara erguido.

Esto ha sido repetido en el viacrucis de 2023 por la hermandad de los Javieres, ya que su titular: el Cristo de las Almas, ha sido la imagen seleccionada en ese viacrucis del Consejo General de Hermandades y Cofradías de Sevilla.

La magia de los viacrucis de las cofradias en el siglo XXI

imagen del Cristo de la Redención. Viacrucis del consejo de 2024

El poder asistir a un viacrucis en Sevilla en esta época, es una auténtica experiencia que nos traslada a otro periodo histórico. La solemnidad de las imágenes en las calles, donde se guarda un respeto infinito debido a la gran devoción que se profesa por ellas.

La música, ya sea de capilla o cánticos con voces blancas con las más bellas coplas de la polifonía española del Renacimiento y el Barroco, que nos evocan el Siglo de Oro español, y nos hace elevarnos, junto con el olor a incienso y en algunos años el azahar. Nos hablan como aquella devoción tan importante en la historia de Sevilla y parte de su impronta, aún sigue totalmente viva en el sur de la península ibérica, y se transmite de mayores a pequeños.

Ya sea en la catedral o en una pequeña calle, los sonidos, los olores, el fervor, nos hace vivir momentos mágicos, y nos atreveríamos a decir irrepetibles, mostrándonos imágenes sublimes que elevan nuestro espíritu y nuestra alma.

Cuando se analiza lo que acabamos de presenciar y se abre los ojos, sólo podemos dar gracias por haber vivido esos momentos y sentirnos unos privilegiados por tener la suerte de haberlo podido disfrutar y paladear. Entendiendo el sentido religioso que siempre ha tenido el pueblo español y como aún se puede vivir y sentir en una parte importante de su territorio; y como todo ello consigue que podamos elevar nuestra alma y nuestro espíritu de una forma muy especial.