Hoy 24 de febrero de 2021 se cumplen los 800 años de la Torre del Oro. Tal día como hoy del año 1221 se terminaba la construcción que había comenzado un año antes, gracias a ella Sevilla tendría una torre albarrana defensiva que sirviera para defenderla de los posibles ataques que pudiera sufrir Sevilla. Además así se preparaba la ciudad para su posible defensa ya que el reino de Castilla y León después dela victoria de las Navas de Tolosa estaba decidido a expandirse por el valle del Guadalquivir.
Su construcción fue ordenada por el gobernador almohade de Sevilla, Abù l-Ulà. Aunque estaba al lado del río tenía una coracha que la unía con otras torres(plata, bronce-recientemente hallados sus cimientos en la calle Santander-Abd el Aziz) hasta llegar al Alcázar.



La experiencia de ataques devastadores en la Sevilla islámica como el de los normandos del año 844 por no tener fortificaciones similares y la situación de la época ya comentada fueron motivos más que suficientes para su realización.
¿Por qué se llama la Torre del Oro?
Lo primero que nos sorprende de la torre es el nombre, una respuesta lógica podría ser por haber servido de depósito de todos los metales que llegaban desde cualquier parte del Imperio a Sevilla en el siglo XVI y XVII para después llevarlos a la Casa de la Moneda cercana y fundirlos. Pero ese no es el motivo.
Luis de Peraza en el siglo XVI nos comenta que el nombre deriva de los azulejos dorados que cubren la torre y que con el reflejo del sol parecen de oro.
El problema que en el siglo XIII Alfonso X el sabio ya la denominaba Torre del Oro, así que lo más probable es que el nombre derive del brillo producto del mortero de cal y paja prensada que recubría la torre. Aunque no hay nada que nos asegure que este debe ser el verdadero origen del nombre.
La Reconquista de Sevilla.
Esa función defensiva para la que fue creada hizo que tuviera un papel relevante para la toma de la ciudad. Sevilla era la capital del imperio Almohade y objeto de deseo del Rey Fernando III, tanto es así que después de conquistarla pone allí la sede de su reino y es enterrado en ella. El importante sistema defensivo de la ciudad con una amplia cerca de más de 10 kilómetros con murallas y barbacanas hacía complicado entrar en la ciudad, además el interior contaba con huertas y estaba unida al rico aljarafe por el puente de barcas.
Por todo lo comentado una flota proveniente de Santander y dirigida por el Almirante Bonifaz entró por el Guadalquivir y cortó las cadenas de protección de Sevilla, hecho que fue básico para la toma posterior. Hoy esas cadenas se encuentran en la tierra de esos marineros y en el escudo de las ciudades y villas que ayudaron a aquella hazaña aparece la Torre del Oro con las cadenas rotas.



Usos de la torre
Otra de las singularidades de la Torre del oro son los diferentes usos que ha tenido a lo largo del tiempo. Además del de torre defensiva desde la toma de Sevilla se utilizó cómo capilla dedicada a San Isidoro, el autor de la Etimologías. Después tuvo un uso de cárcel.
En la época del rey Pedro I se utilizó como lugar para sus encuentros amorosos, llegando a vivir un tiempo en la torre una de sus amantes. En este periodo también se hace una importante reforma.
Aunque la mayor parte del tiempo su cometido ha sido de defensa, como vemos ha tenido diferentes usos, pero no fue hasta el año 1936 donde el Ministerio de Marina decretó su conversión en Museo Naval, se inagura en 1944 con piezas que se trajeron del Museo Militar de Madrid y en la actualidad sigue teniendo el mismo uso.
Curiosidades y problemas
La Torre del Oro es bastante singular por ejemplo por su estructura ya que es dodecagonal, ha sufrido importantes reformas a lo largo de sus años de vida, hemos comentado la realizada en el siglo XIV en la época del rey Pedro I y también se realizó otra en el siglo XVIII pues había quedado en muy mal estado por el terremoto de Lisboa. El arquitecto Sebastián Van der Borcht, macizó la parte inferior, quedando como puerta de acceso la que tenemos en la actualidad y alteró el aspecto superior de la torre añadiendo una parte cilíndrica que es la que posee en la actualidad.
Aunque la Torre del Oro es un símbolo de Sevilla se ha intentado demoler en diversas ocasiones pero el pueblo de Sevilla ha podido evitarlo, uno de esos momentos fue en el siglo XVIII después del terremoto de Lisboa donde el intendente de la época quería ensanchar el paseo y no tuvo otra ocurrencia que proyectar su derribo pero se avisó hasta el rey que intervino y evitó aquella tropelía. Otro momento delicado fue con la Revolución de 1868 y ese mal entendido modernismo que hizo que se tirarán las puertas y murallas de la ciudad, en el listado de las obras que pasarían a la historia se encontraba la Torre del Oro, pero gracias a la labor de Demetrio de los Ríos hoy la torre ha cumplido 800 años y esperemos que nos acompañe muchos más.
Si queréis conocer más detalles nos podéis acompañar en nuestras rutas por Triana y la Sevilla de las Indias.